Se esperaba mucho este día. Despues del tropiezo de Argentina en su primer partido de “su” Copa América, Brasil tenía la posibilidad de mostrar a todos que su cartel de favorito no era facticio y que podía volver a la hegemonía de América del Sur y, después, del mundo. Y así se presentó la Seleção, con un equipo titular muy diferente al de Dunga, más joven aunque con jugadores de experiencia.
Y fracasó. No se puede pedir a jóvenes promesas de tomar la responsabilidad de todo un equipo a la hora de crear juego. Bien sentados en el Santos, Neymar y Ganso están acostumbrados a jugar con sus compañeros. Pero le faltan todavía estos automatismos y, sobre todo la experiencia de competiciones de alto nivel con su selección. Neymar apenas entró en juego y Ganso no tiene la madurez de un jefe de orquesta. Y del resto del equipo tampoco se salvan mucho. El centro del campo generó dudas entre los protagonistas por errores individuales que puso la defensa auriverde en apuros en algún momento. Solo se salvaron Pato, con un par de detalles aunque con altibajos y la certeza que no basta su actuación para un ‘’9’’, y Daniel Alves, muy comprometido y una pesadilla en su banda derecha para los contrarios.
Brasil tuvo la pelota en la primera parte pero su falta de rapidez en el último cuarto del campo no le permitió poner en peligro la portería rival. Aunque joven, le falta frescura y locura en los últimos metros al equipo. La primera ocasión llegó por Pato que estrelló un pelotazo al larguero cuyo ruido se escuchó como el tiro de una pistola en una noche silenciosa en la selva. Ya se había acabado media hora. Y apenas hubo dos ocasiones más de los auriverdes en este primer tiempo aunque una con polémica cuando Vizcarrondo toca el balón con su brazo izquierdo para sacar un remate de Robinho y con el portero batido.
Pero tampoco se jugó el partido aquí. En ningún momento Brasil mereció más que un empate en este partido porque no hizo más frente a un equipo considerado ‘’pequeño’’ en esta competición pero que con un poco de organización, actitud y una defensa agresiva, supo contener a un equipo que todavía busca reencontrar el futbol, la alegría y la etiqueta de ‘’grande’’ de sus predecesores.
El segundo tiempo se convirtió en una vulgaridad sin juego ni ocasiones y con ninguna aportación al desarrollo del partido por parte de los cambios que llegaron del banquillo. Todavía, el barco no está en peligro pero ahora le toca el Paraguay que empató sin goles con Ecuador y que tiene más recursos que los vinotintos. Los brasileños debes despertarse, al igual que Argentina si quiere realmente ganar este trofeo.
Detalles del partido
La Plata (Argentina), Brasil 0-0 Venezuela.
Árbitro : Raùl Orozco.
Amonestaciones para Brasil : Thiago Silva 37’.
Amonestaciones para Venezuela : Salomon Rondòn 61’, César Gonzàlez 63’ y Franklin Lucena 90’.
Brasil : Julio Cesar ; Daniel Alves, Lùcio (cap.), Thiago Silva, André Santos ; Lucas Leiva, Ramires (Elano 75’), Ganso ; Robinho ( Fred 64’), Alexandre Pato (Lucas Moura 75’) y Neymar. Entr. : Mano Menezes.
Venezuela : Renny Vega ; Vizcarrondo, Cichero, Rosales, Rincòn ; César Gonzalez (Di Giorgo 86’), Lucena, Juan Arango (cap.), Perozo ; Miku (Maldonado 78’) y Rondòn (Alejandro Moreno 64’). Entr. : César Farìas.
